Una de las preguntas que con frecuencia se nos hace del despacho es en que condiciones un arrendador de un inmueble puede rescindir el contrato de arrendamiento previo a la finalización del plazo, si el arrendatario cumple con sus obligaciones, fundamentalmente con el pago del arrendamiento.
En otro artículo hablaremos sobre los referidos plazos marcados por la ley de arrendamientos urbanos. Hoy es importante destacar que si el arrendador, transcurrido el primer año de duración del contrato y siempre y cuando el arrendador fuera una persona física y no una sociedad, tuviera necesidad de la vivienda arrendada, ya sea él mismo o sus familiares de primer grado de consanguinidad o para su cónyuge, en los supuestos de sentencia firme de divorcio, podrá recuperar la vivienda.
El tramite para esta resolución anticipada del contrato, es comunicar al arrendatario que tiene necesidad de la vivienda arrendada, debiendo especificar la causa o causas, fundamentalmente la necesidad de uso de la vivienda, al menos con dos meses de antelación a la fecha en la que la vivienda se vaya a necesitar y el arrendatario estará obligado a entregar la finca arrendada en dicho plazo, salvo que las partes lleguen a un acuerdo distinto.
Ahora bien, si transcurrido tres meses a contar desde el efectivo desalojo de la vivienda por el arrendatario, no hubiera el arrendador o sus familiares referidos anteriormente a ocuparla, el arrendatario podrá optar, en el plazo de treinta días, entre ser repuesto en el uso y disfrute de la vivienda arrendada por un nuevo periodo de hasta cinco años o ser indemnizado por una cantidad equivalente a una mensualidad por cada año que quedará por cumplir hasta completar cinco años, salvo que la ocupación por parte del arrendador no hubiera tenido lugar por causas de fuerza mayor reguladas en la ley.
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